Ahora que está tan de moda reivindicar la tapa y el pincho, os recomiendo acceder al interior del restaurante Cañadio para degustar sus pescados fresquísimos, de gran calidad acompañados de una completa carta de vinos. No os arrepentiréis. El atún rojo o la lubina fuera de carta no os dejarán indiferentes y como entrante unas croquetas de chorizo lebaniego o de bacalao con una textura tan cremosa que se deshacían en la boca para culminar con un coulant de chocolate o un helado de queso que no defraudaron y pusieron el toque dulce a una cena muy bien servida por el personal del restaurante que no escatimó en detalles.
Os dejo las imágenes de los platos que hablan por sí solas.
![]() |
Gazpacho de fresas con buñuelos de bacalao |
![]() |
Croquetas cremosas de chorizo lebaniego |
![]() |
Lubina salvaje a la plancha con tomate confitado y salsa de mostaza |
![]() |
Atún rojo marinado a la menta y marcado en la plancha |
![]() |
Coulant de chocolate con helado de mango |
En cuanto a la extensa carta de vinos, de todas las denominaciones de origen nacionales así como varios caldos franceses y alemanes, nos decantamos por un albariño afrutado y refrescante llamado Do Ferreiro, muy acorde con los platos en frescura, con un toque afrutado.
En definitiva, una experiencia a la altura del lugar y que me deja un buen sabor de boca de mi visita a Santander.
Puntuación en gochitos